Durante los años siguientes la joven empresa se desarrolló muy rápido y, gracias a la gran dedicación del joven empresario y su mujer Romy Gelhard (fallecida en 1992), doblo anualmente su volumen de negocio. Peter Gelhard Naturdärme se transformó así en una potente marca y sus relaciones comerciales se expandieron también internacionalmente. La empresa crece constantemente y se ha convertido en una importante creadora de puestos de trabajo de su región.